Por: Mauro Gamín Figueroa y Crystal Ramírez Fernández
Estudiantes de Geografía, Escuela de Formación Territorial GEOUACh
Conocer nuestro territorio desde la infancia en el contexto actual de crisis climática global es de suma importancia para reaprender a habitar nuestro entorno y para conocer los riesgos naturales a los que estamos expuestos. Creemos urgente que las mallas curriculares en Chile profundicen el conocimiento histórico, geográfico y territorial frente a las nuevas amenazas que estaremos expuestos en las próximas décadas, sin embargo, la situación parece negativa, pues los contenidos de historia y geografía se han visto reducidos en los cambios de mallas de los últimos años.
A lo largo de todo Chile, cada territorio está expuesto a múltiples amenazas naturales y antrópicas, por esto se hace necesario una educación territorial integral y multidisciplinaria en las aulas, con el fin de mejorar la respuesta de las comunidades frente a la posibilidad de un desastre. En este sentido, desde la Escuela de Formación Territorial tuvimos la oportunidad de preparar una instancia educativa para quintos y sextos básicos dónde pudimos compartir conocimiento con las y los niños sobre los riesgos naturales y antrópicos presentes en la ciudad de Valdivia.
En primera instancia, la actividad consistió en una presentación sobre los fenómenos naturales y los riesgos que suponen, posterior a nuestra introducción, las y los niñ@s nos mencionaron distintos fenómenos naturales, antrópicos y amenazas que conocían, esto nos permitió pasar a la segunda etapa donde repartimos un mapa que contenía distintos hitos de la ciudad incluyendo su colegio. Ya con el mapa repartido en los grupos las y los estudiantes marcaron con distintos colores las zonas de riesgo, zonas seguras y áreas verdes de interés según su percepción.
Mapa de vulnerabilidad sísmica en la comuna de Valdivia realizada por estudiantes de la Escuela Aliwen.
Al finalizar la actividad reflexionamos sobre los diferentes resultados que dieron las/los alumnos/a del colegio ‘Aliwen’. Donde el 5to básico respondió a la actividad de forma sólida, ya que se encontraban repasando contenido afines a la actividad desarrollada, por lo que la percepción que tienen del riesgo desde una perspectiva teórica fue más acertada. Mientras que 6to básico, entendieron la idea del riesgo desde una noción espacial, identificando distintos puntos de referencia que les ayudaba a tener una mejor percepción de los riesgos.
El desarrollo de actividades de esta índole, hace que el conocimiento universitario académico se entregue y se vincule con los distintos niveles educacionales. La interacción entre estudiantes universitarios de básica fue muy enriquecedora por la retroalimentación que se dio. El uso de instrumentos visuales como mapas permitió acercar a los estudiantes al uso de estas herramientas, donde ellos tuvieron una gran participación y mostraron conocimientos sobre la zonificación del mapa entregado. La actividad abrió ideas sobre sus saberes y percepciones territoriales, en un espacio de aprendizaje que se espera les entregue un estímulo positivo en la formación de un pensamiento territorial.
En conclusión, quedamos satisfechos/as con la actividad, debido a que la recepción de les niñes fue favorable, ya que tenían una gran disposición y muchas ganas de participar. Provocando que el cumplimiento de la jornada se diera en un ambiente grato y educativo para ambas partes. Logramos cumplir con todos nuestros objetivos propuestos para la actividad de forma satisfactoria.